Ciudad de México 08/03/2022.- La violencia sexual está asociada a diversos problemas de salud mental, de acuerdo con especialistas del Instituto Municipal de las Mujeres (Inmujeres) de Tlaxcala, ya que de acuerdo con un estudio realizado, 33% de mujeres con antecedentes de abuso sexual presentaron trastornos psiquiátricos en la edad adulta.
Alondra, fue víctima de abuso sexual a los 15 años: “Yo me di cuenta que fue abuso sexual hasta después de un año” ya que se inició en el abuso de sustancias, disociación, ansiedad y autolesiones. En un estudio realizado con adolescentes en Francia, se comprobó que existe una relación entre ser víctima de violación y dificultad para conciliar el sueño, depresión, afecciones somáticas, consumo de tabaco y problemas conductuales (agresividad y otras más).
Derivado del constante abuso de sustancias, Alondra un día cayó de su cama, golpeándose, lo que la hizo acudir al médico “él me recomendó ir con el psicólogo y ahí me diagnosticaron depresión y ansiedad, luego me recomendaron ir con un psiquiatra y determinó que padezco trastorno límite de la personalidad y comencé con un tratamiento médico con antidepresivos y calmantes al inicio me sentía muy, muy, muy cansada. En la escuela no rendía porque me daba mucho sueño, me mareaba mucho, me sentía desubicada y empezó a bajar mi rendimiento”, detalló.
Alondra cuenta que también ha intentado suicidarse (5 veces) y aunado a su estado de salud, existe también el prejuicio de cargar con una enfermedad mental “mis papás nunca actuaron (en los intentos de suicidio) por prejuicios sociales como el hecho de lo qué pensarían los vecinos si ven una ambulancia enfrente de la casa o al enterarse que su hija está hospitalizada. Nadya Murillo/24mm
